En los últimos días, el senado italiano aprobó una ley que permite el ingreso sin restricción alguna de capital no profesional en la propiedad de las oficinas de farmacia.

La farmacia italiana cambia de modelo y permite el ingreso de capital no profesional, sin restricción alguna.

Mediante la “Ley de Competencia nacional” – que repercute en múltiples sectores – la botica italiana se aleja del modelo de farmacia mediterráneo, que compartía con España y se destaca por establecer que las farmacias sean controladas por farmacéuticos.

El texto de la nueva norma abre el juego al ingreso de capital no profesional en el ámbito farmacéutico, sin restricción porcentual alguna. El único requerimiento es que la dirección del establecimiento recaiga sobre un farmacéutico.

Durante el debate de la ley se intentó establecer un límite porcentual al ingreso de capital ajeno al profesionalismo farmacéutico, algo que finalmente fue desechado.

De acuerdo a la reseña del portal El Global, la única restricción, además de la dirección controlada por un farmacéutico, hace referencia a que esta propiedad de farmacia está vetada a médicos y personas con intereses en la industria farmacéutica, así como la prohibición de que un mismo propietario (como podían ser las cadenas) controlen más del 20 % de farmacias de cada zona/región sanitaria.

Marco Cossolo es el presidente de la máxima entidad farmacéutica italiana (Federfarma) y consultado sobre el ingreso de capital no profesional afirmó que “la farmacia ha sido peor tratada que otras profesiones, en las que sí se han establecido algunas limitaciones”, una medida que considera “diseñada contra la farmacia y en contra de los usuarios”.

Además, el directivo hizo referencia que la norma deja expuesta a las pequeñas farmacias ante un posible oligopolio; ya que, aunque se establezca ese límite de un 20 % de farmacias en manos del mismo propietario, podría darse el escenario en el que solo cinco empresas (cadenas) controlasen el cien por cien de la red de farmacias.