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ADVIERTEN

Precauciones

ADHD. Se desconoce la seguridad a largo plazo de los medicamentos para el trastorno del déficit de atención por hiperactividad (ADHD medicine’s long-term safety still a question)
Ronnie Cohen
Reuters, 2 de mayo de 2014
http://mobile.reuters.com/article/idUSKBN0DI1AX20140502?irpc=932
Traducido por Gloria de la Fuente

Se ha hecho escasa investigación sobre la seguridad de los fármacos utilizados para el síndrome de déficit de atención por hiperactividad, aunque millones de niños americanos han estado tomándolos durante décadas.

El centro para el control y prevención de enfermedades (CDC) calcula hasta el 2011, el 11% de los niños estadounidenses entre 4 y 17 años – unos 6,4 millones- habían sido diagnosticados con este síndrome. Alrededor de la mitad estaban tomando drogas para tratarlo.

“Tenemos muy pocos estudios sobre el efecto a largo plazo de estos fármacos”, declaró el Dr. Sanford Newmark a Reuters Salud.

“Hay un enorme hueco en nuestro conocimiento de cuáles podían ser los efectos de estas drogas. Es preocupante.

Investigadores del Instituto Mario Negri para la investigación farmacológica en Milán, Italia, encontraron gran escasez de estudios sobre los efectos secundarios a largo plazo de estimulantes como Ritalin, que algunos niños siguen tomando por su cuenta cuando llegan aadultos.

Una investigación exhaustiva reveló tan sólo seis estudios, todos subvencionados por las empresas farmacéuticas, que siguieron a un total de 3.000 niños inscritos en ensayos clínicos y tratados con medicación para el síndrome déficit de atención por hiperactividad ,y registraron los efectos secundarios referidos a lo largo de 12 semanas.

“Los fármacos para tratar ADHD parecen ser seguros y bien tolerados de acuerdo con los datos disponibles, pero se necesitan más estudios”, dijo el autor principal del estudio Dr. Antonio Clavenna a Reuters salud en un correo electrínico.

Reducción del apetito, insomnio, dolores de cabeza y dolor de estómago son los efectos secundarios que se han referido con más frecuencia, escriben los autores del artículo [1]. Los pacientes sufren, también, tics y cambios de humor.

Pero los estudios solo referían efectos secundarios comunes y podían pasar por alto otros inusuales, como pensamientos suicidas y erecciones prolongadas que han preocupado a los reguladores estadounidenses, escribe el autor.

“En ese sentido, el perfil de seguridad de estos medicamentos no se conoce completamente y es necesario hacer un seguimiento”, dice Clavenna.

La FDA publicó una advertencia, el pasado diciembre, indicando que Ritalin y Concerta pueden, en casos raros, provocar erecciones tan prolongadas que llegan a requerir intervención quirúrgica. En 2005, después de que los estudios a corto plazo mostraran un aumento en el pensamiento suicida en niños y adolescentes, la FDA ordenó una advertencia de caja-negra sobre estos efectos de la atomexetina, conocida como Strattera.

Los niños diagnosticados con ADHD tienden a tener dificultades para prestar atención y pueden presentar bajo control de sus impulsos. Los médicos prescriben medicación para aumentar su atención y reducir su impulsividad.

Algunos niños mejoran sin tomar medicación, durmiendo mejor, con cambios en su dieta, terapia conductual o ayuda extraescolar. Newmark dijo que él ve a menudo niños cuyos padres se quejan de efectos secundarios de estos medicamentos que no aparecen en los estudios. “Uno de los efectos secundarios del que no hablan y que yo veo a menudo son los cambios de personalidad”. Los padres simplemente dicen: ‘El medicamento está funcionando pero él ha perdido su chispa, o ella ha perdido su alegría’”.

Cientos de estudios clínicos afirman que los efectos secundarios son suaves y temporales, escriben los autores de este estudio.

Al revisar los seis estudios, comprobaron que la proporción de pacientes que dejaron de tomar la medicación, que oscilaba entre el 8 y el 25%, era el único suceso adverso referido en los seis estudios. La mayoría de pacientes que dejaron de tomarlos por sus efectos secundarios lo hicieron el primer año.

Como los estudios investigaban diferentes efectos secundarios, los autores no pudieron comparar los estudios o el resultado de los fármacos. Dijeron que los reportes de los efectos adversos eran insatisfactorios, y escribieron: “Se debería hacer mucho más para mejorar la evaluación de seguridad de estos fármacos”.

En 2011, investigadores daneses, tras revisar los estudios que analizaban los efectos adversos a corto plazo de las drogas para tratar el déficit de atención, buscaron también estudios de sus efectos a largo plazo. Estos investigadores dijeron que prácticamente todos los estudios habían sido patrocinados por las empresas fabricantes de estos medicamentos y que la mayoría de los autores recibían aportaciones de estas industrias.

“El trabajo de las farmacéuticas es vender sus productos”, dijo Newmark.

Es importante para nosotros los médicos basar nuestra práctica en la evidencia objetiva y no en lo que dicen las empresas farmacéuticas. Es más fácil y barato para estas empresas realizar estudios a corto plazo y decir: “Miren, la medicina funciona”

Referencia

  1. Clavenna A, Bonati M. Safety of medicines used for ADHD in children: a review of published prospective clinical trials Arch Dis Child doi:10.1136/archdischild-2013-304170 http://adc.bmj.com/content/early/2014/04/19/archdischild-2013-304170.short?g=w_adc_ahead_tab
creado el 12 de Septiembre de 2017