Salud y Fármacos is an international non-profit organization that promotes access and the appropriate use of pharmaceuticals among the Spanish-speaking population.

ECONOMÍA Y ACCESO

Tratados de libre comercio, exclusividad en el mercado, patentes

Abuso monopólico
Roberto López
La Primera, 6 de diciembre de 2013
http://www.laprimeraperu.pe/online/columnistas-y-colaboradores/abuso-monopolico_156773.html

Todas las medidas de protección de la propiedad intelectual, como las patentes, son anticompetitivas al otorgar exclusividad en el mercado, que puede llevar a “abusos de posición de dominio” tal como lo configura la Constitución Peruana. Abusos que principalmente se traducen en precios altos de los productos protegidos.

Anteriormente hemos visto este fenómeno con el medicamento olanzapina cuyo monopolio y luego oligopolio produjo y sigue produciendo sobregastos a las instituciones prestadoras de servicios de salud (públicos y privados) y a los pacientes que pagan de su bolsillo los tratamientos que requieren.

Lo mismo está ocurriendo ahora con el medicamento atazanavir utilizado para el VIH. La marca que goza de la patente, Reyataz tab. 300mg. de Bristol-Myers Squibb, se vende al sector público en un rango que está entre S40,95 y 29,37 (1US$=S2,83) la unidad (compras de EsSALUD, MINSA, FOSPOLI en 2012 y 2013), que da un precio promedio de S36,13. El total de las tres compras: alrededor de S22,5 millones. Por la condición que le otorga la patente, es el único atazanavir en el mercado y la patente recién expira en el 2018. Alternativamente, Bolivia compra la versión genérica del atazanavir a S1,40 que por lo demás cuenta con precalificación del programa de la OMS. Para los escépticos, nada que ver con la calidad. Resumiendo, en el Perú se paga 24 veces el precio del genérico pagado en Bolivia; que en términos de acceso significa 24 personas más que podrían recibir el medicamento si es que se compra el genérico.

El asunto es grave y cobra niveles preocupantes si es que se proyectan las compras del sector público en cantidades similares cada año. En el caso de las tres compras mencionadas, en total se ha gastado S22.433.540. Si se hubiera comprado la versión genérica como en Bolivia, se hubiera pagado solo S1.003.100. Es decir ha habido un sobregasto de S21.430.440 que si se repite cada año, sumará S107.152.202 al 2018.

La salida es totalmente legítima. El gobierno peruano, en estas situaciones de abuso de posición de dominio y más aún cuando el bien es de interés público, debe otorgar una licencia obligatoria para que un tercero produzca el medicamento o para importar de otros países a precios convenientes.

creado el 3 de Diciembre de 2014