Resumen
Los recursos disponibles para la investigación en salud, incluyendo el financiamiento, pero también tiempo, infraestructura y personal, son escasos. No todos los proyectos de investigación valiosos pueden llevarse a cabo. Invertir recursos en un proyecto resta recursos a otros. Esto significa que se deben tomar decisiones sobre cuál, entre los muchos proyectos de investigación valiosos posibles, debe realizarse primero. El establecimiento de prioridades en investigación en salud es el proceso mediante el cual se formulan decisiones o recomendaciones sobre qué investigación en salud se debe prioriza. Abarca una gama de actividades que las organizaciones pueden denominar “ejercicios de establecimiento de prioridades”, “planificación estratégica” o “establecimiento de agenda”.
Dado que las decisiones sobre qué investigación en salud se lleva a cabo implican decisiones sobre cómo distribuir los escasos y muy importantes beneficios potenciales entre diferentes poblaciones, dichas decisiones no son meramente técnicas. Estas decisiones también incorporan juicios de valor, incluyendo los relativos a qué intereses cuentan y qué constituye una asignación justa de recursos. Esto significa que la ética es un elemento fundamental para el establecimiento de prioridades en investigación: para identificar los objetivos que se quieren alcanzar, la forma en que se lleva a cabo y a quiénes involucra.
Esta guía tiene como objetivo sintetizar las buenas prácticas que se han implementado, para incorporar la ética en el establecimiento de prioridades en la investigación en salud. Es relevante para cualquier persona que tome decisiones sobre qué investigación apoyar o realizar, incluyendo a financiadores, formuladores de políticas, instituciones de investigación, investigadores de salud y grupos de pacientes.