Una organización internacional sin ánimo de lucro para fomentar el acceso y el uso adecuado de medicamentos entre la población hispano-parlante

Políticas, Regulación, Registro y Diseminación de Resultados

Estados Unidos debe acabar con el secreto de los costos de los ensayos clínicos

(US must end secrecy around clinical trial costs)
MSF, 22 de febrero de 2021
https://www.doctorswithoutborders.org/what-we-do/news-stories/news/msf-us-must-end-secrecy-around-clinical-trial-costs
Traducido por Salud y Fármacos, publicado en Salud y Fármacos: Ensayos Clínicos 2021; 24(2)

Tags: HHS, DHHS, MSF, médicos sin fronteras, precio, precio justo, acceso, Dana Gill, avances terapéuticos, financiación pública

El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE UU (HHS, por sus siglas en inglés) debe exigir la divulgación de los costos de los ensayos clínicos financiados a través de sus oficinas y agencias para conocer cómo se utilizan los fondos públicos y garantizar que las nuevas vacunas, medicamentos y pruebas diagnósticas, -incluidas aquellos para COVID-19 – tengan un precio justo, dijo el lunes la organización internacional médico-humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF).

“Revelar lo que estas empresas y otros desarrolladores de medicamentos gastan en ensayos clínicos, como parte del proceso de investigación y desarrollo (I + D), permitiría que individuos y gobiernos determinaran y negociaran mejor el precio justo de los productos médicos que se requieren con urgencia”, dijo Dana Gill, asesora de políticas estadounidenses para la campaña de acceso de MSF.

Es fundamental conocer el costo de estos ensayos clínicos porque las corporaciones farmacéuticas justifican los altos precios de los medicamentos en el costo de la I + D que se requiere para comercializar un medicamento.

“En realidad, los contribuyentes financian una gran parte de la investigación para el desarrollo de medicamentos, y la mayor parte de los costos en I+D de las corporaciones farmacéuticas se incurren durante los ensayos clínicos”, dijo Gill. “El desarrollo de las vacunas COVID-19 ha demostrado al mundo cómo la financiación pública es el motor real de los avances en medicina”.

Los contribuyentes estadounidenses aportan anualmente aproximadamente US$40.000 millones para I + D en salud. Solo para el COVID-19, se han distribuido más de US$10.000 millones a empresas farmacéuticas a través de la iniciativa financiada con fondos públicos anteriormente conocida como Operation Warp Speed, que incluye a los Institutos Nacionales de Salud (NIH) del HHS, la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA), la FDA, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), y el Departamento de Defensa.

MSF, que dirigió programas de COVID-19 en EE UU y está respondiendo al COVID-19 en más de 60 países, también ha participado directamente en los procesos que rodearon al ensayo clínico de la vacuna contra el ébola que realizó Merck en la República Democrática del Congo, así como en ensayos con un medicamento para la tuberculosis que implementó Johnson & Johnson en varios lugares alrededor de todo el mundo.

“MSF sabe lo que sucede cuando la industria farmacéutica no tiene que revelar cuánto cuestan realmente sus ensayos clínicos ni acepta cobrar un precio justo”, dijo Gill. “A pesar de haber apoyado estos ensayos, muchos de nuestros pacientes carecen de acceso a los tratamientos o vacunas cuando estos se aprueban para su uso en la población”.

Para garantizar que el público conozca cómo las empresas farmacéuticas gastan su dinero durante los ensayos clínicos, hay que actualizar ClinicalTrials.gov y exigir que de ahora en adelante las agencias y oficinas del HHS publiquen los costos asociados con los ensayos clínicos financiados por el HHS para COVID-19 y con la I+D de productos para tratar otras enfermedades en el sitio web federal, que actualmente rastrea los ensayos clínicos financiados con fondos públicos y privados a nivel mundial. Si el HHS se niega a realizar estos cambios, los legisladores podrían implementar esta mejora a través de una acción legislativa, o el presidente Biden podría exigir su divulgación pública a través de una acción del poder ejecutivo.

“No hay una razón legítima para mantener el secreto en torno a la investigación y el costo de los ensayos clínicos financiados por los contribuyentes estadounidenses”, dijo Gill. “El público tiene derecho a saber qué está pagando. No exigir la divulgación de esta información protege las ganancias de la industria farmacéutica a expensas de todos, en un mundo que necesita medicamentos y vacunas a precios razonables “.

Puede leer más sobre este tema en el documento Transparency Matters que se encuentra disponible en el siguiente enlace https://www.doctorswithoutborders.org/sites/default/files/documents/Transparency%20Matters_0.pdf

creado el 21 de Mayo de 2021