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Prescripción

Atidarsagén autotemcel (LIBMELDY) para la leucodistrofia metacromática

Rev Prescrire 2022; 31 (243): 289-290
Traducido por Salud y Fármacos, publicado en Boletín Fármacos: Prescripción, Farmacia y Utilización 2023; 26 (1)

Tags: trastorno motor, terapia génica

Para niños menores de siete años, sobre todo antes de la aparición de los síntomas

Ofrece una ventaja

Los pacientes con leucodistrofia metacromática pierden las funciones motoras, sensoriales y cognitivas gradualmente y mueren de manera relativamente prematura dependiendo de la forma de la enfermedad que padezcan. En un ensayo clínico no comparativo —que incluyó una comparación indirecta con “controles históricos”— una única infusión de atidarsagén autotemcel pareció retrasar el progreso de los trastornos motores y cognitivos en los niños menores de siete años con una forma asintomática o débil de la enfermedad. El atidarsagén autotemcel también pareció reducir la mortalidad en algunos pacientes. Hay evidencia de muy baja calidad que sugiere que el tratamiento puede ser más eficaz cuando se administra antes de que aparezcan los síntomas. Los niños tratados se exponen al riesgo de efectos adversos graves asociados a los tratamientos previos a la infusión de atidarsagén autotemcel y, después, a los del atidarsagén autotemcel, sobre los que hasta ahora se sabe muy poco. En la práctica, el atidarsagén autotemcel es una opción que hay que considerar para los niños menores de siete años, sobre todo antes de que aparezcan los síntomas y tomando en cuenta las limitaciones de su evaluación.

LIBMELDYatidarsagén autotemcel dispersión de células para infusión

  • 2 x 106 a 10 x 106 células autólogas por ml, incluyendo CD34+ células madre hematopoyéticas modificadas genéticamente para expresar el gen de la arilsulfatasa A humana sin mutaciones (en una o más bolsas que contienen de 10 ml a 20 ml de dispersión, cada una en un cartucho metálico)
    Orchard Therapeutics
  • Terapia génica
  • Indicación: “leucodistrofia metacromática (…) en niños con formas infantiles tardías o juveniles tempranas, sin manifestaciones clínicas de la enfermedad [y] en niños con la forma juvenil temprana con manifestaciones clínicas tempranas de la enfermedad, que todavía puedan caminar de forma independiente y antes del inicio del deterioro cognitivo”. [procedimiento centralizado UE – medicamento huérfano]

Comparar antes de decidir
La leucodistrofia metacromática es una enfermedad neurodegenerativa rara que afecta el sistema nervioso central y el periférico. Es un trastorno genético causado por mutaciones en el gen que codifica la arilsulfatasa A (ARSA), una enzima que degrada los sulfátidos que forman parte de la mielina que cubre las fibras nerviosas. Estas mutaciones ocasionan un déficit de arilsulfatasa A y una acumulación de sulfátidos en diferentes células, sobre todo en las del sistema nervioso. Esto provoca una desmielinización del sistema nervioso central y el periférico [1-4].

El progreso de los síntomas varía según la edad en que inicia la enfermedad. La edad en la que comienza la enfermedad y la rapidez con la que progresan los síntomas depende en gran medida de la actividad residual de la arilsulfatasa A, lo que a su vez depende de la naturaleza de las mutaciones de cada alelo del gen ARSA. En todos los casos, la enfermedad progresa gradualmente hasta que el paciente queda postrado en cama, con una pérdida completa de las funciones motoras, sensoriales y cognitivas. Los pacientes mueren por las complicaciones de la enfermedad, que suelen ser infecciones y, a menudo, neumonía. La leucodistrofia metacromática se clasifica en tres formas clínicas, dependiendo de la edad a la que aparecen los síntomas [2,3].

La forma infantil tardía aparece antes de los 30 meses. Representa casi la mitad de todos los casos y suele comenzar con síntomas motores y sensoriales. Los trastornos cognitivos aparecen más tarde. La mayoría de los niños mueren durante los cinco años posteriores a la aparición de los síntomas [2,3].

La forma juvenil aparece entre los 30 meses y los 16 años. Representa del 20% al 30% de los casos y suele comenzar con síntomas cognitivos y psiquiátricos, y problemas conductuales. Los trastornos motores generalmente aparecen más tarde. La mayoría de los pacientes muere antes de los 20 años [3,4].

La forma adulta aparece después de los 16 años. Representa entre el 15% y el 20% de los casos y suele comenzar con dificultades en la escuela o el trabajo, trastornos psiquiátricos o problemas conductuales. A veces, la enfermedad empeora en el transcurso de varias décadas [3].

No existe una cura conocida. A mediados de 2022, no existe una cura conocida para la leucodistrofia metacromática. El tratamiento busca aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente tanto como sea posible [2-4].

A veces se ofrece a los pacientes con la forma juvenil o adulta de la enfermedad con pocos o ningún síntoma un trasplante de células madre hematopoyéticas de un donante para corregir la deficiencia enzimática, al menos en parte. Los principales riesgos de este tratamiento son la enfermedad de injerto contra huésped y los efectos adversos asociados al uso prolongado de inmunosupresores [1,2,3,5].

Revisión bibliográfica y metodología

  1. Beerepoot S et al. “Peripheral neuropathy in metachromatic leukodystrophy: current status and future perspective” Orphanet J Rare Dis 2019; 14 (240): 13 pages.
  2. NORD “Metachromatic leukodystrophy”. http://www.rarediseases.org accessed 26 October 2021: 7 pages.
  3. Gomez-Ospina N “Arylsulfatase A deficiency”. In: GeneReviews, University of Washington, Seattle 1993-2021: 26 pages.
  4. HAS – Commission de la transparence “Avis-Libmeldy” 21 April 2021: 50 pages.
  5. Prescrire Editorial Staff “Betibeglogene autotemcel – Zynteglo°. In certain forms of severe beta thalassaemia: despite the uncertainties, an option for achieving transfusion independence in the absence of a compatible donor” Prescrire Int 2020; 29 (221): 290-291.
creado el 12 de Febrero de 2023