El 10 de abril, la FDA anunció un paso decisivo para modernizar la salud pública al sustituir el requisito de hacer estudios en animales, cuando se desarrollan terapias con anticuerpos monoclonales y otros fármacos, por otros métodos más eficaces y relevantes para los seres humanos. Esta nueva estrategia pretende mejorar la seguridad de los medicamentos y acelerar su evaluación, al mismo tiempo que se reduce la experimentación en animales, se reducen los costos de investigación y desarrollo (I+D) y, en última instancia, los precios de los medicamentos.
El requisito de hacer ensayos en animales se irá reduciendo, perfeccionando o sustituyendo mediante diversas estrategias, entre ellas el uso de modelos computacionales de toxicidad basados en inteligencia artificial, y haciendo pruebas de toxicidad en líneas celulares y organoides en los laboratorios, lo que se conoce como Nuevas Estrategias Metodologicas (New Approach Methodologies o NAMs, por sus siglas en inglés). La implementación de estos nuevos lineamientos comienza de inmediato para las nuevas solicitudes para investigar con medicamentos nuevos (IND), donde se alienta la inclusión de datos NAMs, conforme al plan publicado hoy [1]. Asimismo, para determinar la eficacia, la FDA utilizará los datos de seguridad existentes, procedentes de datos de la práctica clínica (mundo real) de otros países con estándares regulatorios comparables, donde los medicamentos ya se hayan estudiado en humanos.
“Los fabricantes han estado, durante demasiado tiempo, realizado pruebas en animales con medicamentos para los que ya había mucha información sobre su uso en humanos en otros países. Esta iniciativa marca un cambio de paradigma en la evaluación de los medicamentos y promete acelerar el acceso a tratamientos significativos, a la vez que reduce el uso de animales”, afirmó el Comisionado de la FDA, Martin A. Makary, MD, M.P.H. “Al aprovechar los modelos computacionales basados en IA, las pruebas de laboratorio en modelos de órganos humanos, y los datos de pacientes que se recaban durante la práctica clínica (mundo real), podemos facilitar el acceso de los pacientes a terapias más seguras de manera más rápida y confiable, reduciendo los costos de I+D y los precios de los fármacos. Es un avance positivo tanto para la salud pública como para la ética”.
Beneficios clave de reemplazar las pruebas en animales al evaluar la seguridad de los anticuerpos monoclonales:
Trabajando en estrecha colaboración con agencias federales como los Institutos Nacionales de Salud, el Programa Nacional de Toxicología y el Departamento de Asuntos de Veteranos, la FDA pretende acelerar la validación y adopción de estos métodos innovadores a través del Comité de Coordinación Interinstitucional para la Validación de Métodos Alternativos (Interagency Coordinating Committee on the Validation of Alternative Methods o ICCVAM).
La FDA y sus socios federales organizarán un taller público a finales de este año para discutir el plan y recabar aportes de las partes interesadas sobre su implementación. Durante el próximo año, la FDA tiene la intención de lanzar un programa piloto para permitir que determinados desarrolladores de anticuerpos monoclonales utilicen una estrategia de pruebas basada principalmente en métodos que no involucren a animales, en estrecha colaboración con la FDA. Los hallazgos de un estudio piloto complementario informarán cambios de política más amplios y actualizaciones de guías que se espera ir implementando por fases.
El Comisionado Makary señaló que esta propuesta tiene una importancia de gran alcance. “Para los pacientes, significa una vía más eficiente para desarrollar nuevos tratamientos. También aporta un margen adicional de seguridad, ya que los sistemas de pruebas basadas en humanos pueden predecir mejor los resultados en la práctica clínica. Para el bienestar animal, representa un gran paso hacia el fin del uso de animales de laboratorio al probar los medicamentos. A medida que estos nuevos métodos se vayan consolidando, anualmente, miles de animales, incluidos perros y primates, podrían eventualmente no tener que participar en experimentos”.
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