En 2024 un equipo francés investigó el edema pulmonar atribuido a la acetazolamida (Diamox), un diurético e inhibidor de la anhidrasa carbónica que se usa principalmente para reducir la presión intraocular [1,2]. Analizaron reportes registrados en la base de datos europea de farmacovigilancia. La vía de administración de la acetazolamida (que se reportó en el 84% de los casos) fue principalmente oral (55% de los casos) y, con menos frecuencia, intravenosa (6,5%). Los problemas para los que se usó fueron cirugía de cataratas (58%), glaucoma (19%) y alcalosis metabólica (3%).
En febrero de 2024, esta base de datos contenía 31 reportes de edema pulmonar atribuido a la acetazolamida. Los síntomas fueron los del síndrome de dificultad respiratoria aguda, con disnea, cianosis, hipotensión e hipoxia; 30 casos fueron graves. En más de la mitad de los casos, los pacientes habían recibido una única dosis de 250 mg por vía oral al momento de la cirugía de cataratas. El intervalo hasta la aparición de los trastornos respiratorios fue de 10 a 90 minutos. En cinco casos, ocurrió un segundo episodio después de reanudar la acetazolamida [2].
Seis pacientes murieron. En cuatro de esos casos, el edema pulmonar ocurrió tras la administración oral de una única dosis de 250 mg de acetazolamida: en tres casos, después de la cirugía de cataratas, y en un caso, después de la cirugía de glaucoma. En los cuatro casos, la autopsia reveló la presencia de edema pulmonar.
El mecanismo postulado es una reacción de hipersensibilidad pulmonar aguda, posiblemente explicada por la estructura química de sulfonamida de la acetazolamida [2].
El edema pulmonar no cardiogénico agudo es una manifestación rara de las reacciones de hipersensibilidad que puede presentarse de forma aislada, sin afectación cutánea, por ejemplo, como una reacción a los medios de contraste yodados [3].
A mediados de 2024 las autoridades europeas solicitaron que el edema pulmonar no cardiogénico se mencionara en el resumen de las características del producto (RCP) de los productos que contienen acetazolamida [4].
En la práctica, las reacciones de hipersensibilidad se pueden manifestar en una gran variedad de formas, incluso sin trastornos cutáneos. Cuando se presentan tales reacciones, es importante obtener una historia detallada de la medicación, para evitar reanudar el medicamento culpable y causar la recurrencia de los trastornos respiratorios, que pueden ser mortales.
Referencias