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Ética

Conflictos de intereses

Alemania. Los médicos reciben con entusiasmo el dinero de las grandes farmacéuticas
(Doctors eagerly welcome big pharma’s money)
Markus Grill, Stefan Wehrmeyer, Christina Elmer
Correctiv, 15 de diciembre de 2016
https://correctiv.org/en/investigations/euros-doctors/articles/2016/12/15/embracing-millionsbe-embraced/
Traducido por Salud y Fármacos

Históricamente, las compañías farmacéuticas han sido generosas con los médicos: pagan sus contratos, les invitan a congresos, pagan por sus habitaciones de hotel y los recompensan por el control de medicamentos. El año pasado, solo en Alemania, un total de €575 millones de las compañías farmacéuticas pasaron a manos de más de 71.000 médicos y expertos médicos. Pero solo 20.000 de estos médicos están dispuestos a revelar su nombre y la cantidad de dinero que han aceptado.

Este es el enlace directo a la base de datos: https://correctiv.org/en/investigations/euros-doctors/database/

Sin precedentes: a fines de junio, 54 compañías farmacéuticas dieron a conocer la cantidad de dinero que distribuyeron a médicos en Alemania. Las compañías farmacéuticas distribuyeron €575 millones a más de 71.000 médicos, expertos e instituciones médicas. Apenas un tercio de estos médicos estaban dispuestos a poner sus nombres junto con estos números. Pero una colaboración conjunta con CORRECTIV y Spiegel Online ha publicado la primera base de datos, que incluye los nombres de 20.489 médicos y la cantidad de dinero que recibieron de la industria farmacéutica en el último año. Cualquier usuario de Internet puede buscar en esta base de datos a los médicos por nombre, ciudad y código postal.

¿Quiénes son los doctores ubicados en la parte superior de la lista? Primero está el Dr. Hans Christoph Diener de Essen, que el año pasado recibió más de €200.000 por conferencias, consultas, capacitaciones y otros gastos diversos. Luego el Dr. Juergen Rockstroh de Bonn con €148.000, seguido por el Dr. Albrecht Nauck, un endocrinólogo especializado en diabetes con €128.000 y otro endocrinólogo, el Dr. Thomas Forst de Mainz con €100.000.

Aunque estos cuatro médicos se encuentran en la parte superior, no necesariamente significa que se embolsaron la mayor cantidad de dinero que pagó la industria en Alemania. Son simplemente los que han “ganado más” entre los médicos que han permitido que se publiquen sus nombres.

Jens Schreiber, un internista de Magdeburgo, el año pasado aceptó dinero de 11 compañías farmacéuticas diferentes lo cual constituye un récord. ¿El más alto de sus 11 “subsidios?” La asombrosa cifra de €24.000 de la compañía farmacéutica Novartis.

El proyecto “Transparencia”
“La publicación de estos datos aumentará el entendimiento y la aceptación de la cooperación entre las compañías farmacéuticas y los médicos”, dice Birgit Fischer, en reconocimiento a la iniciativa antes de que los datos se hicieran públicos.

Fischer es Jefe de Ventas de la Asociación de Investigación de la Industria Farmacéutica (VFA), un gran lobby farmacéutico con sede en Berlín. “El acceso a estos números puede ayudar al público a comprender cómo los médicos y las compañías farmacéuticas trabajan juntos en el sistema de salud”.

El proyecto de transparencia, sin embargo, tiene un gran defecto: los datos son casi indescifrables para los pacientes. El proyecto requiere que las 54 empresas participantes simplemente presented documentos, con los nombres de miles de médicos, en algún lugar de su sitio web. En muchos casos, los documentos eran PDFs ilegibles o que solo incluían el nombre del médico. En otros casos, se mencionaba la ciudad, pero no el código postal. No encontramos datos con una presentación utilizable y una herramienta de búsqueda en ninguna parte. Y según Holger Diener, el CEO de FSA, el organismo autorregulador de la industria farmacéutica alemana “esta base de datos no se planifica”.

Algunas empresas incluso prohíben expresamente el uso de sus datos. Gruenenthal, una compañía farmacéutica alemana, escribió en su sitio web que “la publicación de estos datos de ninguna manera da permiso para que se utilicen o se editen”. UCB Pharma también publicó una advertencia: “El lanzamiento de nuestros datos no otorga, bajo ninguna circunstancia, permiso para que los visitantes del sitio web analicen los datos”.

Un banco de datos con 20.000 nombres
A pesar de estas advertencias, CORRECTIV y Spiegel Online avanzaron y utilizaron los datos de las compañías farmacéuticas para crear una base de datos con una herramienta de búsqueda y de uso gratuito. Esta es la primera base de datos en Alemania que enumera a más de 20.000 médicos por su nombre y revela la suma exacta de todas las finanzas otorgadas.

En el último año, se pagó a los médicos un total de €119 millones por conferencias, capacitaciones y gastos de viaje. Esto equivale a un promedio por médico de €1.646.

A esto se suman otros €366 millones como pago por monitorear los efectos de los medicamentos y otros estudios médicos, sobre los cuales las empresas se niegan a proporcionar información. “No diferenciamos más en el sector de la investigación”, dice Birgit Fischer mientras intenta justificar la actual falta de transparencia en lo que respecta al monitoreo de medicamentos y las observaciones de su uso. “Cuando se hizo, esta fue una decisión que todos acordamos”.

La industria farmacéutica siempre argumenta que estas observaciones son importantes para la investigación, pero Juergen Windeler, director del Instituto de Calidad y Economía en Salud (IQWiG) piensa que este comentario tiene su gracia. “Estos estudios son científicamente inútiles”, dice. “No brindan información valiosa sobre el uso o la efectividad de un medicamento. Por eso ni siquiera los miramos”.

Los pagos influyen en los médicos
Durante años, los expertos han debatido la influencia que pudieran tener los pagos farmacéuticos en los médicos. La mayoría de los médicos creen que no les influyen, incluso si son patrocinados por la industria. Pero luego salió un estudio de un hospital de California. Se preguntó a los médicos que trabajaban en el hospital si las farmacéuticas influían en la selección de medicamentos. El 61% dijo “que para nada”. Los investigadores del estudio cambiaron las preguntas y preguntaron a los médicos si pensaban que los pagos que reciben sus colegas de la industria farmacéutica les influía y el 84% de los encuestados dijeron que sí.

En Alemania, Klaus Lieb es uno de los muchos que investiga el impacto de los pagos. Es director de la Clínica de Psiquiatría y Psicoterapia de la Universidad de Mainz. “Nosotros, los médicos, tenemos un punto ciego cuando se trata de conflictos de interés. Dejamos que las compañías farmacéuticas nos paguen y seguimos creyendo que somos independientes”.

Lieb publicó un estudio en la revista PLoS One demostrando que los médicos, que con frecuencia reciben a representantes farmacéuticos, recetan más medicamentos que aquellos que no lo hacen. “Además, los médicos que asisten a una sesión de capacitación patrocinada por las farmacéuticas en promedio recetan medicamentos más caros”. Y también que los médicos muy cercanos a la industria farmacéutica enfatizan los beneficios de los medicamentos y minimizan sus riesgos. “Ahora tenemos una base de datos excelentes con todos estos datos”, dice Lieb.

Un ejemplo de EE UU
Los cálculos de CORRECTIV y Spiegel Online muestran que solo el 29% de los médicos aceptaron que se divulgaran sus nombres. Este bajo número preocupa a Lieb. “Esto no es transparencia”, dice. “No se puede hacer mucho con estos datos a nivel individual, especialmente en comparación con la ley Physician Payments Sunshine [de EE UU]”.

Esta ley fue aprobada durante la presidencia de Barack Obama en 2010. Exige que todas las compañías farmacéuticas publiquen la cantidad de dinero y el nombre del médico al que entregaron alguna compensación, independientemente de si el médico está de acuerdo o no.

“No hay leyes planeadas”
Cuando se le preguntó si habrá algún cambio en el proyecto de transparencia, dado que un porcentaje tan bajo de médicos permitió que se publicaran estos datos, el Ministro de Salud Federal de Alemania, Hermann Groehe del partido CDU, dice: “No hay planes de sacar regulaciones adicionales a las normas vigentes sobre transparencia y lucha contra la corrupción. “La Ley Sunshine de Obama no es una opción para Alemania” y añadió: “Las reglas en EE UU enfrentan críticas. Muchos argumentan que la presentación de pagos a médicos y compañías, sin contexto, aumenta la probabilidad de que sean vistos como corruptos”, respondió el ministro al ser cuestionado.

Klaus Lieb, de la Clínica Universitaria de Mainz, considera que la divulgación del dinero invertido en los médicos es un avance. “Cuando se divulgan estos pagos, los médicos se toman muy en serio sus propios conflictos de intereses. [El doctor] tiene que reconocerlos y adquiere una cierta perspectiva. Esto lo ayuda a ver descubrir aspectos de su conducta que no se daba cuenta”.

Peter Sawicki, que como jefe de IQWIG fue un importante inspector de medicamentos durante muchos años, interpreta las pautas de transparencia de la industria farmacéutica puramente como una campaña: “Esta es otra medida para presentarse ante el público como profesionales honrados”. Y enfatizó que los pagos de las industrias farmacéuticas influyen enormemente a los médicos, una conclusión que ha sido respaldada por múltiples estudios. “Es realmente hora de que a la luz de estos hallazgos enfrentemos las consecuencias, y generemos oportunidades de capacitación para que médicos sean independientes de las grandes farmacéuticas. Pero falta la voluntad política”.

Colaboradores: Hristio Boytchev, Ariel Hauptmeier, Christoph Henrichs, Simon Jockers, Ivo Mayr, Philipp Seibt, Patrick Stotz, Achim Tack.

creado el 4 de Diciembre de 2020